jueves, 18 de noviembre de 2010

LOS AMIGOS DE SOSTRES

Postgrados, corresponsalías en Nueva York, trabajos en la UE, en la agencia EFE, o la dirección de informativos de TVE. Quién diría que estas trayectorias corresponden a las de los miembros del horrible club de la caspa de la televisión, y como ya habréis supuesto por el título, no estoy hablando precisamente de Belén Esteban.
Nos quejamos de la telebasura, cuando sabemos que al fin y al cabo todo eso es un teatro, mientras que no decimos nada sobre los cafres que debaten cada día sobre política en las televisiones. Preferimos obviar el tema, hacernos los alternativos y decir que no nos interesa la política. Craso error, por cierto.
Por supuesto que estoy hablando de Sostres, pero también hablo de la vergüenza que me da escuchar a Curri Valenzuela, o del miedo que siento cada vez que María Antonia Iglesias abre la boca para atacar, por decirlo finamente, sin piedad a la derecha.
Que me corrijan los expertos si estoy equivocado, pero que yo sepa, el respetar el turno del rival y al rival mismo, el atacar con argumentos y no con frases vacías que buscan el aplauso fácil, son reglas que se deben dar en todo debate político.
Y es que, es inconcebible que semejantes personas, las cuales demostraron un día que podían ser grandes profesionales, se hayan pervertido hasta ser los hooligans políticos del momento.
No me extraña que mientras estos individuos estén en el prime time diciendo una perogrullada tras otra, la desafección hacia la política crezca a pasos agigantados cada minuto que pasa. Para que luego digan que los medios no son el cuarto poder. Bastante tenemos ya los ciudadanos con intentar arreglar los tres poderes como para intentar también arreglar el cuarto.
Señores de los medios, den un canal aparte a todos estos individuos que se creen que su argumento es mas convincente por gritar mas, sáquenlos de las televisiones que todos vemos, pónganles a hacer monólogos si hace falta, como hicieron con Urdaci; pero por favor se lo pido, pongan a opinar sobre política a gente que quiera aportar algo más al pueblo que unos cuantos gritos y unos cuantos insultos. Sin ninguna duda, eso será lo mejor para todos.

miércoles, 17 de noviembre de 2010

SÁHARA

Como podéis ver, el asunto a tratar en esta entrada esta bastante claro. En cuanto a las opiniones legales que hay sobre el asunto, el derecho internacional atribuye ciertas responsabilidades a España, ya que aún sigue siendo la potencia administradora, aunque sea Marruecos el que administre de facto el territorio.

Es cierto que España tiene responsabilidades sobre el Sáhara, como es cierto que al gobierno le encantaría resolver mañana mismo el problema, pero tenemos que contar con las consecuencias que eso tendría. Para empezar, Marruecos dejaría de colaborar en la lucha contra la inmigración ilegal en la frontera, además de suspender los contratos pesqueros que tiene con la UE, de los cuales, por cierto, tenemos intereses grandísimos, (sino vayan a preguntar a la costa gaditana), ya que los caladeros marroquíes son vitales para la flota española. Otra cosa a tener en cuenta es que Marruecos, así son las cosas, es uno de los mayores aliados del mundo occidental para luchar contra el terrorismo islámico. ¿Verdad que ahora la cosa cambia?

Yo soy el primero que quiere la independencia del Sáhara y el fin de la administración marroquí, pero no puedo entender como se ataca a este gobierno desde todos los frentes, un gobierno que está mirando, al fin y al cabo, por los intereses de los españoles, algo que tanto dice hacer el principal partido de la oposición; quién lo diría, según sus declaraciones de los últimos días. No echemos la culpa a este gobierno de un asunto heredado de todas las administraciones anteriores, incluso del antiguo régimen, no ha sido este gobierno el que creado el statu quo actual. No digo que no se deba actuar porque no lo hicieran los otros gobiernos, sino que debemos analizar fríamente el tema antes de hacerlo.

Algunos deben aprender de una vez lo que es la oposición constructiva y dejarse de intentar captar votos como sea, la política no es sólo eso, también es consenso y mirar por los intereses del estado antes que por los propios, solo los buenos gobiernos hacen eso, a pesar de las consecuencias.
Y es que el poder desgasta, pero no estar en el poder desgasta mucho más, ¿No os parece?